Casa Vieja
Casa Vieja conserva sus gruesos muros de casi un metro de espesor, que datan de finales de 1800. Fue en la década del 70 un convento, donde vivieron las religiosas de la congregación de la orden de San José Obrero. Hoy convertida en un hotel, abre sus puertas a todo aquel que quiera disfrutar del natural encanto de Chachapoyas. Conservar el esquema arquitectónico y constructivo de sus orígenes y su entrañable alma de hogar, es su fortaleza.